Ingredientes (unas 6 personas)
- 200 gramos de almendras crudas
- 200 gramos de miga de pan de pueblo, asentado, del día anterior
- 2 dientes de ajo (3 si son pequeños)
- 1 vaso de aceite de oliva virgen
- 1 cucharada de vinagre
- 1 litro de agua bien fría
- Sal
Elaboración
Poner un cazo con agua al fuego y cuando empiece a hervir, echar las almendras (para escaldarlas) y mantenerlas 2 ó 3 minutos, sacarlas del agua, pelarlas y reservarlas.
Remojar la miga de pan con un poco de agua fría.
En un mortero, almirez o dornillo, echar la sal y los ajos y majar bien con la maza ( triturar todos ellos en la batidora). Cuando los ajos estén bien majados, agregar las almendras y seguir majando y removiendo, hasta conseguir una pasta homogénea. Entonces echar la miga del pan y seguir con el majado constante, sin descanso.
Cuando todo esté bien mezclado ir añadiendo el aceite, muy poco a poco, en chorrillo fino, mientras se sigue mezclando con la maza, hasta que el aceite se incorpore a la masa. Añadir entonces, también poco a poco y sin dejar de majar, el vinagre (no mucho ojo) hasta conseguir una salsa espesa, de aspecto muy similar al de la mayonesa.
Pasar la pasta a una sopera e ir agregando el agua fría, poco a poco, de forma que la pasta se vaya aclarando. Cuando se logre la textura deseada (ni muy espeso ni muy liquido), probar de sal y rectificar si fuera necesario, entonces colocar la sopera en el frigorífico hasta la hora de servir, porque el secreto es tomarlo muy frío.
Se sirve en cuencos acompañados por uvas moscatel o por trocitos de manzana.
En algunos
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